Hubo un día lunes en el cual estaba buscando una lavandería que ejerciera también como tintorería. Necesitaba sus servicios para volver a teñir mi blusón de presentación de color negro, ya que estaba un poco desgastado y se notaba el verde grisáceo que antes lucía. Y además necesitaba un lavado. Iba caminando por avenida Manuel Montt hacia el sur cuando me fijé en un letrero afuera de las altas casonas rojas antiguas, una cuadra antes de Eliodoro Yáñez.

El letrero decía «Plataforma 516», con unas letras que parecían sacadas de Harry Potter. Por lo que pude advertir esa primera vez, se trataba de un negocio, quizá un café, inspirado en ese universo. En mis paseos anteriores por este sector no recuerdo haberme fijado en la existencia de algo similar aquí. En efecto, Manuel Montt es un sector con una amplia oferta gastronómica: pubs, restoranes, bares, cafés, etc. Sin embargo, este negocio estaba cerrado, por lo que debería esperar para poder visitarlo y, quizá, narrar la experiencia en una crónica.
Además que estaba más preocupado por mi blusón de combate, por lo que decidí tomar una fotografía de entrada y más tarde podría buscar sus redes sociales, si es que las tuviese. Y cuando el tiempo se me dio, la encontré en Instagram, y decidí que apenas tuviera algo de tiempo podría ir a visitarla y tomar mas fotografías.
La ocasión se dio el domingo 10. Tenía un horario de atención un poco acotado así que, después de mi almuerzo decidí apresurarme para no quedarme con las ganas. Llegué a las afueras del café, y si bien la puerta estaba abierta, el umbral estaba atravesado por una cadena. Sin embargo, la dependienta advirtió mi presencia y decidió dejarme entrar, aunque advirtiendome que la cocina estaba por cerrar. Así que debía pedir pronto mi comanda. Fueron muy amables conmigo, y me convidaron a que buscara un lugar y me acomodara.

Dentro de mi apartado, una vez adentro, empecé a advertir las pinturas artísticas de los muros, los letreros vinculados a ala franquicia, algunos frascos que simulaban posiciones mágicas, un cuadro con monedas, y las banderas de las cuatro casas de Hogwarts. Efectivamente, el café estaba inspirado en el universo literario de Harry Potter. Tome algunas imágenes y empecé a observar, fascinado, mi alrededor. No tenía idea de qué un lugar así podía existir en Providencia. Y ahora estaba dentro de él, viviendo en medio de esa magia. En un café de Hogwarts sin salir de Provi, huyendo del frío de esa domingo nublado.
En ese instante llegó una garzona, y tomo mi pedido. Anotó mi pedido, lo confirmó y con amabilidad se retiró a la cocina.
Mientras tanto, yo seguía observando ese lugar en el que estaba instalado. Los muros estaban pintados como si fuera un castillo, con forma de ladrillos grises. En piso era de madera y el cielo estaba cubierto de fondo blanco y algunas figuras del universo mágico. Habían espadas colgadas, muros pintados inspirados en la hechicería, grandes ventanales, cuadros con las portadas de las primeras ediciones de Harry Potter, letreros, escudos, ampolletas de colores y hasta un dragón colgando. Y pese a todo, el lugar no parecía muy oscuro. Me sentía muy a gusto en este momento.

Tardó 5 minutos la garzona en llegar con mi pedido: una trozo de Torta Gry, que era de Red Velvet y una taza de Té Chai latte, con su respectivo trío de sobres de stevia. El plato estaba decorado con la numeración 9 3/4 escrita en manjar, numeración que corresponde al universo mágico de la saga. De manera amable se retiró y yo quedé en ese comedor con mis manjares.
El Té Chai Latte es una de mis variedades favoritas. Tiene un sabor un tanto condimentado pero sin perder su refresco y suavidad. Y la Torta Gry sencillamente me fascinó. A mí me encantan las tortas y creo que ésta es de las mejores que probado. Y al mismo tiempo tenía el detalle de qué en su parte superior contaba con un escudo de Gryffindor hecho de chocolate blanco. Una torta bastante sabrosa para endulzar aquella tarde nublada de la capital. Suave y dulce, además de fresca. Mientras la degustaba, sacaba algunas fotografías del entorno. Me gustaba lo que veía: los cuadros, los frascos, el piso de madera, las pinturas murales, las banderas de las casas de Hogwarts. Todo era para mi deleite visual, como espectador, y también para el aprecio por parte de los entusiastas fanáticos de la saga.

Llegó la hora de pagar la cuenta y despedirme, además de comprometerme conmigo a volver con un poco más de tiempo. Antes, decidí ir al otro apartado disponible y fotografiar una efigie de Voldemort que allí se encontraba. Hablé un poco con la dueña del local, y me explicó que existían dos locales que homenajeaban a ese universo (el otro era el restorán Magic de Departamental en San Miguel). Pero que el café era el más fiel a la saga. Aparte, me habló de la Pastelería que tenían y que se llama igual que el café, que es desde donde vienen los manjares que sirven en el café. Y me fijé que vendían libros de la saga, adquiridos directamente con la editora Salamandra (eran unos libros inmensos). En todo caso, mencionó que los volúmenes más pequeños pueden adquirirse en la página web del café (si, tienen una web). Y tenían más pastelería alusiva en la vitrina con sus colores brillantes y sus texturas llamativas. A ratos, me recordó al antiguo Café Comics que quedaba una cuadra más al norte. Agradecí la atención dispensada, pagué la cuenta y me ofrecieron volver, pero en lo posible en una horario menos cercano al cierre. Me despedí de ellas- la dueña y las tenderas- y salí con la satisfacción del deber cumplido, la curiosidad saciada y el recorrido mágico por un universo nuevo hecho.
Gracias por llevarme a Hogwarts.
Nota: El café Plataforma 516 está ubicado en Manuel Montt 516, en Providencia, Santiago de Chile. El horario de atención es Martes de 13 a 20, Miércoles a Viernes de 9:30 a 20, Sábados de 10 a 20 y Domingos de 10:30 a l6:30 horas. Lunes está cerrado. El teléfono es 2-2436-2562. Su Instagram tiene el mismo nombre sin espacios. Su web es www.plataforma516.com . Y la Pastelería de la firma está en Manuel Montt 2283, Segundo Piso, pero en Ñuñoa. Es un lugar de compras para llevar, mas no para servirse. El horario de esta pastelería es de Lunes a Sábado de 10:30 a 19:00 horas. Y el teléfono es 2-2436-2563.






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